1939- HOMENAJE A SIGMUND FREUD -1989

1939- HOMENAJE A SIGMUND FREUD -1989

EL ENIGMA DEL DESEO

EL SEXO SE REHUSA AL SABER

Olga M. de Santesteban

Bajo el título El enigma del de­seo se inaugura este año el home­naje a Sigmund Freud.
Han transcurrido 50 años desde su muerte en 1939… Su invención es hoy patrimonio de la cultura y su descubrimiento nos aporta una práctica que permite intervenir sobre lo real del síntoma a través del lenguaje.
Hay una nueva relación, original, impensable antes de su descubri­miento, pero afirmada y formali­zada: es la relación de un sujeto a un no saber, tal como Jacques Lacan lo planteo en: Proble­mas cruciales para el psicoanálisis 1964-65.
Hay rechazo a un cierto punto de saber. El saber es el saber del sexo.
El sexo en su esencia de diferencia radical permanece tachado y se rehusa al saber, -este interdicto so­bre el sexo- produce sujeto… un sujeto constituido por esta igno­rancia.
Así…un sujeto sin saber, saber que aparece bajo la forma de un  yo no quisiera saber nada de eso. Se funda así el enigma del deseo.
Al crear una nueva práctica Freud inau­gura un nuevo lugar: psicoanalista. Jacques Lacan decía:

 “Ser psicoanalista, es estar en una posición responsable, la más responsable de todas, en tanto él es aquel, a quien le es confiada la operación de una conversión ética radical, aquella que introduce al sujeto en el orden de su deseo … ”

 Un homenaje a Sigmund Freud, es quizás, solo la puesta en acto de una rutina sostenida por una vida analizante.

 Esto es, un trabajo de recreación de la obra, en un intento de formaliza­ción de la experiencia clínica a los fines de la transmisión.
Significantes que consuenan, otor­gando vigencia a la universalidad de su descubrimiento: transferencia, síntoma, repetición, fantasma, ese más allá del principio del placer, que hace de la economía de goce, una articulación fantasmática soste­nida por el deseo.

Un estilo de lectura que intenta res­catar las escanciones que han quedado en la construcción clínica.
Por todo esto –un homenaje a Sig­mund Freud – es rodear y cercar el enigma del deseo.

Recorrer su obra, articular los intersticios que dejó abiertos, corroborar y cotejar los fantasmas descu­biertos, instituye los rasgos que de­finen un estilo en relación al nombre propio.

Un homenaje, es un estilo en la creación de la relación con los psicoanalistas, siempre atravesada por la transferencia a los significantes que funda el psicoanálisis.

Jacques Lacan indicaba:

Lo que tú quieras cuando seas psicoanalista, no irá nunca más lejos que allí donde él puede condu­cirte…
¿Cuál es el riesgo de ese matrimonio a la suerte del psicoanálisis? (1965).

El efecto chistoso se expande… muchos años después ya en el 71-­72 en… Où pire dirá:

…ficciones, encantamientos, será buena la re­gla de que el psicoanalista se diga ante esa ficción que es el matrimonio… que ellos se las arreglen como puedan.

Vuelvo a 1965, Problema cruciales para el psicoanálisis:

No basta que tú seas, según la fórmula clásica, perfectamente claro en tus relaciones con tus pacientes, es necesario también que tú puedas soportar tus relaciones con el psi­coanálisis mismo.

Mi posición está, pues, bien ligada a la suerte de todo aquello que se llama: los psicoanalistas. Pues el psicoanálisis mismo no esta en ninguna otra parte.

No se puede esperar nada más del psicoanálisis que lo que allí se pone. Lo que yo exijo es, a saber penetrar lo que hay detrás de una cierta resistencia instituida…
Esta es la puesta en cuestión esencial… ”

Y en La Proposición del 9 de octu­bre de 1967:

 Escuela: eso puede indicar que un psicoanalista siempre tiene que poder elegir entre el aná­lisis y los psicoanalistas.

Un homenaje no puede escamotear la herencia recibida: No hay invención de una práctica sin Escuela de psicoanálisis. Entendiendo esa institucionalización mínima que formará Escuela a la relación
analista – analizante.

Así fue para Freud, su producción: la Asociación Psicoanalítica Interna­cional.
Así fue para Lacan, su producción: la Escuela Freudiana de Paris. Ambos ratifican la convocatoria a sus analizantes y Escuela será: un aparato de producción donde se aporte las innovaciones y formalizaciones que se articu­lan en el dispositivo analítico. Hacer serie, nos convoca a retomar estos significantes para hacer con ellos transmisión.

1989

Ratificado 2008